La palabra Ruah en hebreo significa espíritu. Por ella se denomina nada menos que al Espíritu Santo, el mismo que viene en ayuda de nuestra debilidad e intercede por nosotros (Rom 8, 26). Estas páginas nos transmiten el itinerario de preparación para el sacramento de la Confirmación, acompañando a los más grandes en el Reino de los Cielos.
Las personas que sufren discapacidad intelectual padecen, a veces, la incomprensión de los demás. Esta catequesis nos va a permitir ponernos en su lugar. Aprenderemos a abrazar su fragilidad y a adquirir los medios suficientes para transmitirles, de forma adecuada y adaptada, todo lo necesario para prepararse para la Confirmación y, sobre todo, descubrir la cercanía de Dios. A su vez, viene acompañada de la formación y el seguimiento de sus padres. Ellos participarán activamente en cada uno de los encuentros para profundizar lo que sus hijos están aprendiendo.